Cuando el Dr. Martin Luther King, Jr. fue asesinado en 1968, nuestra nación necesitaba desesperadamente una manera de enfrentar, afligirse y sanar de la pérdida. 150.000 personas comenzaron este proceso asistiendo al servicio conmemorativo del Dr. King en Atlanta. 120 millones más buscó el mismo consuelo al verlo en la televisión.

Al ver el Memorial televisado del Dr. King, los dolientes de toda la nación presenciaron la devastación de su viuda y su familia al entrar en la Iglesia Bautista de Ebeneezer. A miles de kilómetros de distancia, estos dolientes escucharon mientras las campanas de la iglesia resonaban y el órgano tocaba. Cuando el servicio terminó, los que estaban observando desde casa debieron haber sentido como si estuvieran caminando junto a la procesión fúnebre. Algunos incluso pueden haber levantado su voz en solidaridad a medida que la multitud comenzó a cantar, "Venceremos." 

Hoy, TribuCast™ ha hecho posible que todas las pérdidas en nuestras vidas se lamenten de una manera que una vez fue reservada sólo para figuras públicas significativas y héroes, como el Dr. King:

  • A través de un TribuCast, los seres queridos que no pueden estar allí en persona pueden participar en un funeral o servicio conmemorativo al verlo en vivo, incluso si viven a mitad de camino en el mundo o se quedan enfermos en la cama.
  • A través de un TribuCast, los familiares y amigos lejanos pueden pasar de enfrentar su dolor individualmente a compartir el duelo colectivo y comunal, lo cual es fundamental para el proceso de curación.
  • A través de un TribuCast, los dolientes pueden aprender más sobre el fallecido, participando con contenido único creado por familiares y amigos, como imágenes, historia familiar, poemas, pinturas y oraciones.

En Resumen, TribuCast proporciona una manera para que todo el mundo, incluso aquellos que no pueden asistir en persona, se reconforte en el hecho de que no están solos en su tristeza, sino que son parte de una mayor comunidad de pérdidas.   

Han pasado más de 50 años desde el fallecimiento del Dr. Martin Luther King, Jr., y de muchas maneras el país sigue sanando de su muerte. Sin embargo, de las muchas lecciones que enseñó, su última puede haber sido esta: los funerales, si bien no son una panacea para el sufrimiento, juegan un papel fundamental en la reparación del corazón de las personas y las comunidades – y en su caso, incluso las Naciones. 

En nuestro mundo cada vez más móvil y global, TribuCast ofrece una manera para aquellos que permanecen atrás para reparar y sanar ante la gran pérdida. Obtenga más información sobre lo que TribuCast puede hacer en www.TribuCast.com

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